Qué miedo tengo del día que seas consciente de la muerte, de la guerra, del hambre, de la desigualdad, de la envidia, de las malas intenciones, del odio, de la frustración personal, existencial y de la que otros te causarán. Qué miedo tengo de tu soledad, de mi ausencia y del vacío que nos rodeará. Qué miedo...qué impotencia...qué miedo. Qué alivio tengo del día que seas consciente de tu fuerza, tu entereza, tus conocimientos, tu capacidad de sobreponerte, tus ganas de vivir, tus ganas de hacer feliz a los demás, tu buen hacer, tu humanidad y de la fuerza de tu mirada. Qué alivio...qué felicidad... qué alivio. Huraño de Peloponeso
Idiosincrasia de un hombre huraño de Peloponeso